La voluntad de Dios
Hace un tiempo un sacerdote misionero, a quien admiro y estimo mucho, me contaba que hace ya algunos años le hablaron para decirle que lo habían considerado para mandarlo a una misión pero que querían su opinión, el respondió "Padre, tu sabes que yo voy a donde me manden, no me tienes que preguntar".. Y el otro sacerdote le dice, es que hay 3 lugares a donde puedes ir: España, EUA y Perú, tu dime a cuál quieres... el Misionero le responde después de unos segungos "a Perú"..
El sacerdote extrañado le dice, no no no, cómo a Perú? mejor piénsalo bien y mañana me respondes, el misionero le contesto, mañana le diré lo mismo, Perú...
Total, así quedó, el misionero iría a Perú, pero días después el sacerdote le pregunta que por qué eligió Perú.. y el misionero respondió.. "Mira, España me encanta! Ya viví ahí muchos años y me encantaría regresar.. EUA, me llama mucho la atención, me gusta mucho el inglés, etc.. pero en cambio, Perú no me llama nada la atención"..
El sacerdote confundido, y le dice, qué? como que no te llama la atención? entonces por qué elegiste Perú?... Y el misionero respondió, porque si yo elegía España o EUA, al momento de la prueba me iba a poder reclamar a mí mismo que yo elegí españa/eua porque a mi me gustaba, porque fue mi deseo... en cambió cuando venga la prueba en Perú, no podré decir eso, al contrario, voy a estar seguro que fue sólo la voluntad de Dios y que yo no quería hacer mi voluntad ni seguir mis propios deseos, si no solamente agradar a Dios.
Esta anécdota me gustó mucho y me ha ayudado bastante en este camino.. hay que morir a nosotros mismos, incluso a nuestros más grandes deseos para que la Voluntad de Dios se haga en nosotros, para vivir en un FIAT junto a María.
Hoy le quiero agradecer a este sacerdote, si algún día ve esto, muchas gracias por todo, gracias por su entrega, gracias por su sí, gracias por sus palabras.. GRACIAS!